Hoy.
Hoy salí a las calles con el verbo inquieto y elocuente, camine por las aceras de la mano de la letra y la palabra, el pavimento se convirtió en oraciones de repente, y los párrafos fluyeron en el poema que se plasma. Hoy recorrí las historias de alegrías y tristezas, observe a las aves del olvido y el recuerdo, hice un recuento de mentiras y promesas, y me doy cuenta que estoy loco y que soy cuerdo. Hoy volé por las nubes de lo incierto abrí mis alas hacia un cumulo de realidades, me pose sobre los cables de lo absurdo, y desde ahí observe los ojos de los entes. Hoy soy el héroe y el villano de las autobiografías, el humano de los sentimientos encontrados, soy el individuo simple y complejo de las ironías, el resultado de mil cuentos no contados. Hoy deje al niño de las travesuras en retratos, y al adolescente kamikaze en memorias y utopias, llevo en la piel las historias de juventud y arrebatos, y hoy soy el adulto romántico, que supero las melancolías. Hoy vivo el día sin soberbia